Dios es gay

Publicado por Miuler Vásquez en , , ,

Y seguimos con las pintadas de Huesca. Esta vez, toda una declaración de creencias.

El patrón de Huesca, para quien no lo sepa, es San Lorenzo. Y por eso en el centro de la capital altoaragonesa tenemos una, más que hermosa, basílica en honor a San Lorenzo. El frontal tiene forma de parrilla y por dentro es preciosa, de estilo barroco, oiga.

Uno da por supuesto que todo lo que rodea y contiene una iglesia, en este caso una basílica, es palabra de Dios, por lo que nadie lo pone en duda, no?

En el lado izquierdo de la basílica hay un callejoncillo que va a parar a la calle Azlor, que ya comentaba ayer, sitio apetitoso para los y las que les gusta hacer pintadas. Pero ¿qué ocurre cuando la pintada saca del armario al más todopoderoso de la religión cristiana?


Sí amigas, según parece alguien en Huesca cree saber a ciencia cierta de la orientación sexual de Dios. Y va y lo saca del armario, sin pudor alguno. No sé cuanta gracia le habrá hecho a Dios este outing, porque llevamos desde el inicio de la humanidad sin saber las tendencias sexuales de Dios.

El caso es que esta pintada lleva ya días. Que digo días, ¡años! Que si a Dios le molestara que dijeran de él que es gay, la hubiera hecho desaparecer. O alguno de sus representantes en la tierra la hubiera mandado borrar. Y allí sigue.

Esto me da que pensar. Igual los curas que trabajan en esta basílica no le prestan la suficiente atención al único lateral descubierto del sacrosanto lugar. Lo cual me parece fatal. Que no dudo de la cantidad de trabajo que tiene un cura, pero chica, una miradita de vez en cuando no va mal. Miradita a la pared, se sobreentiende.

Otra opción es que sí que la hayan visto pero que pasen de quitarla. Puede que les de igual porque saben que Dios no es gay. Ni hetero. O puede que, como ya nos adelantó Kevin Smith en Dogma, Dios es una mujer (pero por favor que no sea Alanis). Y así, si Dios es ella, pues no sería gay. Sería Dios es hetera. O Dios es lesbiana. O no, porque una ya no sabe que pensar.

Total, que uno se siente bien, cuando vuelve a casa, pasando por ese callejón y ve que Dios es gay (me refiero a la pintada). Y claro, si vas con el pedo de exaltación de la amistad aún te alegras más. Y vuelves a casa con una sonrisa de oreja a oreja. Por la gracia de Dios. O de quién hiciera la pintada.