Tintín y Milú en una viñeta de Tintín en el Tibet.
El medio de prensa oficial del Vaticano, L’Observatore Romano, dedicó un artículo en su portada al héroe del comic, Tintín. En el texto recogía la polémica surgida a raíz de un artículo publicado por Matthew Parris en The Time, en el que sacaba del armario a Tintín.
El argumento de este ex-diputado conservador británico, y que ha declarado su homosexualidad, ha sido calificado por el Vaticano como una “polémica insulsa”, y tienen muy claro que Tintín no es gay.
Para defender esta postura, L’Obsservatore Romano se hace eco de las opiniones del psiquiatra francés Serge Tisseron, recogidas por el diario francés Le Figaro, que asegura que “considerar gay a Tintín es una extrapolación ilegítima”.
Según Tisseron, en Tintín, “la dimensión sexual está ausente, nunca se define, ya que en realidad, todos los personajes son niños”.
Tintín y Milú en una viñeta de Tintín en el Tibet.
El periódico del Vaticano afirma que Tintín no es más que “el héroe que todos quieren ser, el amigo que todos quieren tener”.
El traductor de Tintín en Italia, Gianfranco Gorla también lo tiene muy claro: “¿Tintín gay? ¡Pero sí es un niño!”. Y sobre la ausencia de cualquier relación afectiva del reportero, y de personajes femeninos asegura que “en esos años las mujeres aparecían en los comics sólo para meterse en problemas y ser salvadas por los héroes”.
