“No más muertes, no más discriminación”, reza uno de los carteles que portaron los manifestantes
Contra los llamados "crímenes de odio", una colorida marcha realizada por la comunidad de transexuales y homosexuales de Honduras llamó la atención ayer en la capital por el llamado de justicia de los protestantes.
La manifestación inició a las 2.00 de la tarde en el parque El Obelisco de Comayagüela, y culminó en los bajos del Congreso Nacional.
En la marcha exigieron leyes que garanticen el derecho a la libre movilización, a la libertad e independencia sexual y, sobre todo, "para que los crímenes de odio y la impunidad no se sigan cometiendo".
Donis Reyes, coordinador de la Asociación Arcoiris de Honduras, pidió castigo para los responsables de "tantas muertes de nuestras compañeras y compañeros que ha habido. En diciembre y enero la muerte y la violencia ha enlutado a nuestras familias". El último crimen ocurrió el viernes pasado cuando sujetos no identificados quitaron la vida a una de sus activistas. "Se trata de una miembro de la asociación Violeta, activista de derechos humanos de la comunidad Trans, identificada como Nicole, quien fue asesinada a mansalva por desconocidos a las dos de la mañana en su oficina de trabajo", explicó Reyes.
"Creemos que esto no puede continuar, estamos cansados, no más violencia". Pidió al Gobierno "que no ignore, que nos haga caso, que somos seres humanos".
La comunidad homosexual emitió también un comunicado dirigido a la Corte Suprema de Justicia para pedir la investigación, justicia y castigo de los crímenes, así como leyes que garanticen la no discriminación a su colectivo.
Desde el año 2007 hasta enero de 2009, al menos 28 homosexuales han sido asesinados en Honduras.
