Apoyamos los casamientos Gays

Los latinos hemos luchado muy duro por la igualdad de derechos. Por eso tenemos que unirnos y apoyar a un sector de nuestra comunidad que es aún más discriminado que cualquier otro: los gays y las lesbianas.

Este fin de semana hubo protestas contra las medidas que prohíben los matrimonios gay. La medida golpea duro a esta comunidad en California, donde miles se han casado desde que la Corte Suprema Estatal legalizó el matrimonio gay allí la primavera pasada.

Tras la decisión, en Nueva York, el gobernador David Paterson anunció que los organismos del estado reconocen los matrimonios gay realizados en otras jurisdicciones.

Sin embargo, aquí hay quienes se oponen al matrimonio gay, entre ellos el senador estatal y pastor Rubén Díaz. El amenaza con frustrar cualquier ley los reconozca en Nueva York.


El reverendo Díaz y otros quieren quedar bien con todos: supuestamente están en contra de negarle derechos a los gays, pero creen que el matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer. Es esta posición discriminatoria la que sirve para excluir a las parejas gays y negarles derechos, beneficios y el trato que reciben los heterosexuales. Este uso de creencias religiosas para bloquear derechos civiles socava la cláusula de separación de la Iglesia y el Estado. Razón por la que millones emigraron a América huyendo de la persecución religiosa, salieron a buscar la tolerancia y la libertad en el “Nuevo mundo”.


Los latinos debemos tener un diálogo honesto sobre la homofobia que hay dentro y fuera de nuestras comunidades. Discriminar por el color de la piel, el estado de inmigración o la sexualidad no es aceptable.

Al mismo tiempo, una agenda de los derechos de los homosexuales debe ser representativa del LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales) y de los latinos y de las profundas injusticias que tienen que enfrentar. Es necesario cerrar las diferencias entre las luchas por los derechos de LGBT y las luchas por la justicia económica y social.

Fuente: http://www.impre.com/