La comunidad hispana y los matrimonios gay

Joseph Mercado y Justin Niehoff participaron ayer en una protesta contra la revocatoria de la ley que amparaba las bodas gay en California. La manifestación tuvo lugar en Chicago. También hubo manifestaciones en Nueva York y otras ciudades. (FOTO: ImpreMedia)

Nueva York — La polémica por la legalización del matrimonio entre parejas del mismo sexo está candente. La revocatoria de una ley que permitía estas uniones en California ha dado paso a un debate nacional donde la opinión de la comunidad hispana refleja posturas encontradas sobre el tema.

Según un estudio realizado por el Pew Hispanic Center y el Foro Pew Sobre Religión y Vida Pública, entre la comunidad hispana, la religión y la visión de la sociedad siempre han estado ligadas.

El sondeo revela que en el tema de matrimonios entre parejas del mismo sexo, los latinos evangélicos en los Estados Unidos son los más conservadores. Un 86% de ellos se opone férreamente a este tipo de relación.

No obstante, entre los hispanos católicos ese porcentaje se reduce a un 52% en oposición y despliega una minoría liberal importante de un 32% que lo favorece, un cambio importante desde el sondeo de 1996 cuando el porcentaje de oposición era de un 64%.

Según el reporte, la religión no es el único factor que influye entre los hispanos a la hora de adoptar una posición sobre los matrimonios gays. Su opinión también varía de acuerdo a la nacionalidad, edad, el tiempo que llevan en los Estados Unidos, el nivel de educación y conocimiento del inglés. La investigación reseña que los inmigrantes más recientes y los que menos dominio del inglés tienen, tienden a ser los más conservadores.

El sondeo concluye que los inmigrantes centroamericanos son los que más se oponen los matrimonios entre personas del mismo sexo, un 63%, seguidos por los dominicanos y los mexicanos, un 56%.

El 61% de los hispanos de recién llegados al país están en contra de las uniones gay, mientras que solo 46% de aquellos que son segunda generación lo están.

El 60% de quienes sólo hablan español están en contra de las bodas gay, mientras que sólo el 49% de hispanos que habla primordialmente inglés está en desacuerdo.

Para Filia Rodríguez, dominicana de 28 años, la decisión es muy difícil. “Todo lo que está en el mundo es de Dios, así que no hay nada de malo en el hecho de que un hombre ame a un hombre y una mujer ame a una mujer”, asegura.

Sin embargo, no puede decir si está en contra o a favor de que se legalice el matrimonio entre parejas gay. “A mi me enseñaron desde pequeña que el matrimonio es entre una mujer y un hombre. Es confuso”, expresa Rodríguez

En cambio, para la hispana Janill Vargas, de 18 años, la decisión es fácil. “Deberían legalizarlo”, opina Vargas. “Todos somos humanos y buscamos lo que queremos. No hay nada de malo”, agrega tras explicar que su mamá, de 39 años de edad, está en desacuerdo con la unión gay. “Las dos pensamos diferente”, dice Vargas.

Ángel Gonzáles, compañero de trabajo de Vargas, resume su posición sobre el asunto refiriéndose a la Biblia.

“La Biblia dice que el hombre fue creado para la mujer y la mujer para el hombre”, sostiene el dominicano, de 24 años.

Con posiciones a favor o en contra, la discusión está sobre el tapete y tocará esperar futuras decisiones legales al respecto.

Carmen.alarcon@eldiariolaprensa.com
Texto extraido de: http://www.impre.com/