La Santa Sede esta en contra de las penas para los homosexuales



La Santa Sede, en nota oficial hoy publicada, aprecia los esfuerzos de la “Declaración de los Derechos Humanos, sexualidad y orientación e identidad de género”, presentada el pasado 18 de diciembre por la Asamblea General de las Naciones Unidas, para condenar toda forma de violencia contra las personas de condición homosexual, y para hacer un llamamiento a todos los países para que tomen todas las medidas a su alcance para que desaparezcan todas las penas legislativas con ellos.

Al mismo tiempo, la Santa Sede observa que la formulación concreta de esta Declaración va más allá de esta intención, que comparte plenamente.
En particular, la terminología “orientación sexual” e “identidad de género”, usadas en el texto, no encuentran un reconocimiento, ni una clara y compartida definición en las legislaciones internacionales. Esta asunción comparta, además, una grave incertidumbre jurídica.

En todo caso, la Santa Sede ha querido dejar bien claro que estas objeciones al lenguaje ideológico utilizado, y sus consecuencias que incluso pueden poner en cuestión otros derechos humanos universalmente reconocidos, no significa en absoluto que no siga sosteniendo que todo signo de injusto rechazo y discriminación a las personas homosexuales debe ser evitado, así como que los estados deben acabar con las penalizaciones de criminalidad para los mismos.