Madres de alquiler para adopción gay

La reconocida calidad interpretativa de Pilar López de Ayala es tan evidente como su hermosura. Aunque en la filmografía habitan títulos marcados con la etiqueta «de época», lo cierto es que lo mismo vale para un roto que para un descosido. En «Como los demás» tiene el papel de una argentina sin papeles en Francia. Su pasado televisivo le ha proporcionado soltura para enfrentarse a la esquinada mirada de las cámaras y así lo han sabido ver nuestros vecinos. Los críticos la reclaman para entrar en la élite de las actrices europeas de nuevo cuño. «En Francia no me conocían y esta película de Vincent Garenq ha significado una gran oportunidad», considera.

El filme no deja a nadie indiferente. «La posibilidad de adopción por una pareja homosexual, las madres de alquiler, la familia y el amor, como eje central del relato ha permitido al director mezclar marginalidad y conformismo sin politizar ni adoctrinar a nadie. Ha trabajado en el proyecto durante años y el guión tiene unos diálogos tan inteligentes como para desmenuzarlos en tono de comedia. Es una película necesaria», explica Ayala ante el estreno de la cinta en España.

Madre de alquiler para una pareja homosexual y enamorada de uno de ellos, ¿se siente satisfecha del trabajo? «Garenq ha sido muy audaz adentrándose en un tema tan actual como la homoparentalidad. En España es menos novedoso que en Francia, donde, como le decía, llama la atención que se hagan estas propuestas tan radicales, en las que la gente se mete a bucear cuando es tan conservadora. Los franceses tienen esta mezcla. La gente de mi generación no se plantea estas cosas en profundidad. En mi caso, tuve que informarme. En cuanto a las madres de alquiler, es como para hacer otra película. Mi personaje es muy generoso y complejo al tomar la decisión de ser madre de alquiler».

A su compañero de reparto, Lambert Wilson, le dijeron sus padres de pequeño que estaba en el mundo por casualidad, ¿cree que es necesario crecer sabiéndose no deseado? «Lambert tenía motivos para implicarse con esta película. Es importante el deseo de ser padres, independientemente de su condición. Creo que debe primar el cariño y el respeto que le puedas dar a un ser humano. La prueba está en cómo en el filme se reconcilia la familia alrededor de una cuna. El hijo encarna un valor universal que transciende cualquier prejuicio. El amor por encima de todo». Asegura que «el trabajo te da oficio y no entiendo lo de ser actriz sin ponerle pasión. Me gustan las películas que me comprometen».